martes, 27 de abril de 2010

Desaparecer.

Soy de las que le gustan sacar lo mejor de cada persona. Que sabe que detrás de una careta de perfección, hierro y que no siente nada hay todo lo contrario. Y casi siempre lo saco. No me importa insistir una y otra vez. No me gusta abandonar lo que me propongo.No hasta el final. Porque detrás de esa careta hay un ser maravilloso, sensible que le afecta todo o casi todo. Conozco a muchas personas con esta careta. Pero yo, más de una vez he conseguido quitarla, y lo que había detrás, es, maravilloso. También soy de las que no dan segundas oportunidades de ningún tipo. No comprendo porque las personas desperdician la primera, y es la más importante. No me gustan que me fallen. Y en estos diecisiete años recien estrenaditos hay muchas personas que me fallaron. También soy de las que piensan que si te fallaron es porque no merece la pena, o porque no querían seguir a tu lado, y así, era una forma de decir adios. Maldita manía de decir adios. Me gusta más un hasta luego, te veré pronto... y no desaparecer sin más, sin despedirse. Odio las despedidas. Me encantan que confien en mí. Es señal de que nunca he fallado. A lo mejor alguna vez si, claro, nadie es perfecto, pero jamás incoscientemente. Me encanta que mis amigas me cuenten sus problemas, y que me pidan consejo, que les diga mi opinión. De cualquier cosa, de cualquier tipo. Hoy estoy harta, nosé porqué. Harta de que apenas nadie me demuestre nada y que exijan más de mí. Será porque estoy asqueada de tantos examenes, de tanta responsabilidad y de tantas ganas que tengo de desaparecer de aquí. Nunca lo he deseado ni necesitado tanto como hoy.

domingo, 25 de abril de 2010

Imprescindible.

Todavía nosé lo que voy a escribir. No es como otras veces que dices, hoy voy a hablar de tal cosa, me apetece escribir esto, me apetece quejarme de lo otro... Hoy no, hoy todo lo contrario. Después de una noche con amigas, alcohol y gente a tu alrededor, solo puedes levantarte de una manera: con resaca. Esa compañera inseparable del domingo por la mañana, que lo único que quieres es beber ocho litros de agua y/o vomitar. Yo llevo tiempo optando por lo primero, es más sano.
No me canso de decirlo, quiero irme a Londres ya. Quiero que se acabe esta pesadilla llamada bachillerato que a veces puede con mi optimismo. Maldito optimismo, se va cuando más lo necesitas.
Anoche me dormí entre los gritos de mi madre por haber llegado tarde 12 minutos. Es única. La oía, pero no la escuchaba. Lo único que si le escuché fue: maldita manía que tienes de pasar de todo. Si. Es mi manía preferida. Pasar de todo. Intentar de preocuparme solo por lo imprescindible. Con mi orgullo. Eso que nunca falte. A veces trae cosas buenas, y a veces todo lo contrario. Pero, entre otras muchas cosas, es lo que me hace ser diferente del resto de la humanidad. Porque a veces oímos, pero muy pocas escuchamos.

sábado, 17 de abril de 2010

no se dice, pero siempre lo supe.

Amo este lugar, pero me da miedo sin ti. Mi corazón cansado late muy lento. Nuestros corazones cantan menos de lo que queremos. Nuestros corazones cantan porque no lo sabemos.
Para alumbrar la noche para ayudarnos a crecer, no se dice pero siempre lo supe. Puedes agarrarme, abrazarme o besarme siempre que quieras. No corras si vives otro dia en esta casa feliz, el fuego esta aqui para quedarse, para acompañarnos.
Por favor no armes un escandalo, no va a desaparecer lo maravilloso de todo esto, es que estoy aqui para quedarme.

Que pase el tiempo.

Cincuenta y cuatro días. Es lo que quiero, que corra el tiempo lo antes posible. Cincuenta y cuatro días para una experiencia nueva, única, indescriptible y por supuesto alocada, viva, adolescente, pura...
Si pudiera arrancar las hojas del calendario lo haría, sin dudar.
Londres. Bonito lugar para que pasen muchas cosas, que estoy segura de que pasaran. Habrá muchas locuras, habrá amigas, amigos, otros no tantos, miedo de que nos pillen, pero aun así nos la jugamos, conocer sitios fascinantes que en tu vida has visto y probablemente, no volveras a ver. Porque esto es una oportunidad para todos, para mi, para ti. Desconetar. Aunque sean cinco días. Si, pueden parecer pocos, pero con ellos me conformo. Sin padres, sin reglas, con ellas. Y esas noches,dios ¡dichosas noches que nos esperan!, comprando alcohol, en una habitación todos... me imagino muchisimas cosas pero no puedo, tengo que centrarme en los estudios. Necesito aprobar todo. es más lo haré. Igual que dije que por mis co... iba a ir a Londres, y aquí estoy, con la maleta casi abierta esperando meter toda la casa dentro y desaparecer, si cinco días.

jueves, 15 de abril de 2010

Quiero.

Quiero cambios. Más cambios. Quiero sol. Quiero primavera. Quiero verano. Quiero irme de aquí. Quiero nuevas sensaciones. Quiero nuevos sentimientos. Quiero lo que no quiero. Quiero conseguir lo que me propongo. Quiero a mis amigas.Quiero respirar aire limpio. Quiero olvidar todo por un rato. Quiero caminar a ningun sitio. Quiero encontrar algo que realmente me satisfaga. Quiero sacar buenas notas. Quiero dejar de ser tan orgullosa. Quiero seguir siendo. Quiero cerrar los ojos y que se me aclare todo. Quiero todo. Quiero cosas imposibles. Quiero cosas dificiles. Quiero perder todo y conseguirlo en un minuto. Quiero sentirme aún mejor. Quiero disfrutar. Quiero confundirme. Quiero acertar. Quiero volver a hacerlo mal. Quiero conocer gente. Quiero absolutamente todo.


Enfrentados, opuestos del mismo lado. Contrarios en todo sentido pero en un solo sentido. Contradicciones con un solo motivo, con un motivo que todos comparten y todos aceptan. Somos un amasijo de una misma cosa tan heterogenamente diferente que a veces ni sabemos donde están nuestras diferencias. Tal vez sea el deseo de vernos distintos el que nos hace luchar incansablemente.
Aprovecha todo el amor que puedas dar o recibir. Toda la felicidad que puedas birlar o brindar. Cualquier medida de gracia pasajera, si la cosa funciona.
En este momento hay seis mil cuatrocientos setenta millones, ochocientos dieciocho mil, seiscientos setenta y un habitantes en el mundo. Algunos huyen asustados. Otros vuelven a casa. Algunos cuentan mentiras para poder sobrevivir. Otros se enfrentan a la verdad. Algunos son hombres malos en guerra contra el bien. Y algunos son buenos, y luchan contra el mal. Seis mil millones de personas en el mundo. Seis mil millones de almas. Y a veces solo necesitas a una.