jueves, 10 de junio de 2010

Se acabo la vuelta atrás.


Después de tantos meses contando hacia atrás, he llegado a cero. Mañana me voy, la suerte está hechada y la acepto. Creo que después de haber pasado una de las semanas más largas de mi vida, con más nervios y por qué no decirlo, llorando a todas horas, llega el momento de hacer la maleta e irme. Si, Londres. Cinco magníficos días en los que sé que serán inolvidables, que me pasarán mil cosas, y me reiré mil y una vez. Solo espero que todo el esfuerzo que he hecho esté recompensado.